MANIFIESTO POR LA PATERNIDAD AFECTIVA
Colectivo de Hombres por relaciones Igualitarias A.C .- CORIAC A.C.
México, 2000.
APERTURA AL CAMBIO
La sociedad, la vida, la pareja, las hijas y los hijos, cambian, lo que en un tiempo nos funcionó como papás, ahora ya no.
Acepto que mis hijas e hijos crecen y toman sus propias decisiones.
PARTICIPAR CON COMPROMISO Y EQUIDAD
Antes los hombres no cambiaban pañales, no hacían de comer, ni limpiaban la casa. Ahora sé que si todos ensuciamos, todos podemos colaborar.
Con mi ejemplo estoy educando a mis hijas e hijos.
NEGOCIAR CON SENSIBILIDAD
Con las hijas, hijos y la pareja es necesario aprender a tomar acuerdos que consideren los deseos y las necesidades de todas y todos.
Antes de gritar o imponer mi punto de vista, aprendo a escuchar y procuro comprender.
EDUCAR CON IGUALDAD A HIJAS E HIJOS
Las hijas y los hijos valen igual, por tanto todos tienen los mismos derechos y oportunidades.
Para reducir y eliminar el machismo en mis hijos y la sumisión y la dependencia en mis hijas, evito los privilegios y la sobreprotección.
SOMOS PAPÁS, PERO TAMBIÉN PAREJAS
Vivir o no con la madre de mis hijas e hijos, no excluye que en todo momento seamos parejos en la atención a sus necesidades.
El trato que le doy a la madre de mis hijas e hijos quedará impreso en sus corazones.
SI VIVO EN PAREJA
Mis relaciones más satisfactorias de pareja quizás sean aquellas donde; ambos damos lo que podemos dar; recibimos lo que la otra u otro es y tiene; buscamos mantener la equidad; respetamos acuerdos y nos tratamos con dignidad.
Al reconocer que mi pareja vale tanto como yo y que es diferente a mi, aprendo a apreciarla, aceptarla y respetarla.
NO A LA VIOLENCIA, NI A LOS MALOS TRATOS
Los golpes, castigos e insultos no ayudan a educar, por el contrario, dejan sentimientos de desvalorización, tristeza e incomunicación.
Cuando enseño o pongo límites a mis hijas e hijos, procuro dialogar y poner el ejemplo.
SER PAPÁ ES UN CONTINUO APRENDIZAJE
Las hijas e hijos crecen obedeciendo a su cuerpo, sensaciones y deseos; desconocen las normas sociales que poco a poco aprenden observándonos. Así ambos aprendemos, y al final e irremediablemente se hacen cargo de sus vidas.
En todo momento estoy aprendiendo de mis hijas e hijos
DEFIENDO MI DERECHO A LA TERNURA
Cada cual expresamos nuestro amor y cariño como mejor sabemos hacerlo, aunque no siempre como los demás desean o necesitan.
Aunque lo calle, disfruto y defiendo mi derecho a ser tierno con mis hijas e hijos.
LA PERFECCIÓN NO EXISTE, LA COMPRENSIÓN SI
Para ser mejor necesito: revisar cómo me siento como papá y pareja, aceptar a mis hijas e hijos cómo son, estar dispuesto a reconocer mis errores y a dar lo mejor de mí.
No soy perfecto, todos los días intento nuevas formas de escuchar y entender a mis hijas, hijos y pareja.
NUESTRA PRESENCIA Y CERCANIA SON SIEMPRE IMPORTANTES
El acompañamiento del padre y la forma en que demuestra su cercanía, marcan toda la diferencia en el sentir de sus hijas e hijos.
Los mejores recuerdos que tengo de mi padre son cuando ambos disfrutábamos de nuestra compañía.
EL MOMENTO ES AHORA ...
Si pensamos que lo que damos no es suficiente, el momento es ahora... de dar la caricia, el abrazo, el beso, la comprensión, de dialogar...
Hoy sé que en la familia todas y todos somos importantes, valiosos y a nadie puedo excluir.
PUBLICADO POR: ESTELA MENDOZA - TÉCNICA EN IGUALDAD Y RECURSOS SOCIALES.
Comentarios