Castilla-La Mancha ayudará con 4.000 euros anuales a los menores huérfanos por violencia machista
La familia de los menores no tendrá que esperar una sentencia firma para poder cobrar la ayuda
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado que el Gobierno regional ayudará con 4.000 euros anuales —alrededor de 300 euros al mes— a los menores huérfanos por violencia machista, incluso cuando la sentencia aún no sea firme. La medida se incluirá en los Presupuestos de 2018.
"Vamos a poner nuestro granito de arena. Con los presupuestos de 2018 entrarán en vigor unas ayudas de 4.000 euros a niños que se han quedado sin madre con motivo de la violencia machista". Con estas palabras, García-Page ha dado a conocer la medida, que según ha señalado, da respuesta al debate social que existe sobre la situación de los menores huérfanos por violencia de género. Además, en su intervención, Page ha valorado "el esfuerzo" que hacen familiares como los abuelos con los menores que han perdido a sus madres por esta lacra.
El anuncio ha tenido lugar durante el acto organizado por la Comunidad por Día para la Eliminación de la Violencia de Género y que se ha celebrado este viernes en Torrijos (Toledo) bajo el lema “Ponle fin para tener un principio. Juntas contra el machismo". Al evento, además del presidente regional, han acudido el presidente de las Cortes autonómicas, Jesús Fernández Vaquero, y los dirigentes de las diferentes diputaciones provinciales.
Esta ayuda se sumará a la aprobada el pasado mayo en el Congreso de los Diputados con el consenso de todos los partidos y que prevé una pensión mínima de 677 euros para los niños huérfanos por violencia machista, incluso en aquellos casos en los que las madres no hayan cotizado a la Seguridad Social. Hasta entonces, solo podían cobrarla menores cuyas progenitoras hubieran trabajado, al menos, 500 días en los últimos cinco años.
Además, Castilla-La Mancha ultima los trámites para la aprobación de una nueva ley de violencia de género en sustitución de la actual —que data de 2001— y con la que los hijos de las mujeres que sufran violencia machista pasarán a ser considerados como víctimas.
Entre 2013 y 2016, de media, 40 menores han perdido a sus madres en España como consecuencia de la violencia de género, según cálculos de la Fundación Mujeres. Tomando como fecha de referencia la entrada en vigor de Ley de Medidas Integrales contra la Violencia de Género, en 2004, la cifra total se sitúa alrededor de los 500 huérfanos.
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